Las exigencias organizacionales, son cada día más: se espera que las operaciones no solo sean eficientes, sino también resistentes a los riesgos y en conformidad la normativa aplicable.
La selección de un marco de control adecuado y la definición del modelo de control más conveniente emergen como pilares fundamentales para alcanzar estos objetivos. En este artículo nos enfocaremos en brindarte un enfoque experto con consejos útiles y buenas prácticas para la implementación de modelos de control efectivos acorde a tu organización.
Antes de sumergirnos en la elección de un marco, es crucial entender las particularidades de tu organización. Esto incluye considerar la industria, el tamaño, los requisitos legales y los objetivos estratégicos específicos.
Un enfoque personalizado es indispensable dado que cada organización enfrenta desafíos únicos.
La familiarización con marcos de control utilizados globalmente, como COSO para control interno, NIST para ciberseguridad, o ISO 31000 para la gestión de riesgos, es un paso inicial importante.
Sin embargo, la elección debe basarse en cómo estos marcos se alinean con las necesidades específicas de tu organización y su capacidad de integrarse con prácticas y estándares ya existentes.
Revisar casos de estudio y mejores prácticas de organizaciones similares en la región puede ofrecer perspectivas valiosas.
Además, la consulta con expertos en soluciones de Gobierno, Riesgo y Cumplimiento, proporciona una visión crítica y adaptada a las particularidades de tu organización.
Seleccionar el marco de control adecuado y definir un modelo de control eficaz son procesos que requieren consideración cuidadosa y un enfoque personalizado.
Los KPIs, por su parte, ofrecen una herramienta valiosa para monitorear la efectividad de estos esfuerzos y deben ser diseñados para reflejar los objetivos específicos de tu organización.
Una evaluación de riesgos detallada es el primer paso para identificar las amenazas específicas a las que se enfrenta tu organización.
Con base en ella, se determinan los controles necesarios para mitigar esos riesgos, siempre tomando como referencia las recomendaciones de los marcos de control seleccionados.
La personalización del modelo para ajustarse a las necesidades y contexto específicos de tu organización es crucial.
Esto puede requerir modificar controles existentes o desarrollar nuevos. La integración efectiva con los procesos de negocio es fundamental para evitar interrupciones y promover la adopción por parte de los empleados.
Es vital seleccionar KPIs (Key Performance Indicators o indicadores clave de rendimiento/desempeño) relacionados con los objetivos de Gobierno, Riesgo y Cumplimiento de tu organización y definir metas claras y medibles.
La implementación de herramientas de software para el monitoreo en tiempo real y la generación de informes facilita la toma de decisiones basada en datos.
Además, la revisión y ajuste regular de KPIs asegura que se reflejen adecuadamente los cambios en los objetivos de negocio y el entorno operativo y hasta regulatorio.
La adopción de un marco de control adecuado y la personalización del modelo de control son fundamentales para una gestión de riesgos eficaz.
Estas prácticas no solo impactan positivamente en el rol de los directores de gestión de riesgos, asegurando una alineación con los objetivos estratégicos y la conformidad con las normativas, sino que también promueven la competitividad y resiliencia organizacional, además de contribuir al establecimiento de controles que permitan el crecimiento de la organización desde la toma de riesgos informada, que parte desde el marco y modelo de control elegidos.
Si quieres ahondar más en este tema, te recomendamos descargar el ebook ¿Qué tan maduro es tu modelo de control de riesgos? en el que podrás responder grosso modo a esta pregunta sobre la base de los cinco niveles que en ORCA identificamos a lo largo de más de 20 años.