Los estándares y sistemas de control de calidad han mejorado de manera notable con la digitalización empresarial en los últimos años, impactando de forma favorable en las estrategias y rentabilidad de los negocios.
Sin embargo, los responsables del control de calidad pueden encontrar dificultad para emplear la información de valor que se obtiene del plan de control de calidad para estandarizar la calidad, debido a que en muchas organizaciones aún no se adoptan estrategias con este enfoque ni tecnologías de automatización de procesos.
Con la digitalización de procesos, es posible mantener la consistencia de la calidad a través del tiempo y, además, favorece el cumplimiento de los requerimientos de los diferentes clientes y usuarios.
El reto está en implementar soluciones que combinen el diseño de una estrategia apoyada en controles, tecnologías e indicadores de calidad para automatizar y eficientar los procesos del control de calidad y así asegurar la mejora continua y mayor rendimiento del negocio.
El plan de control de calidad es un programa que sirve para establecer procedimientos operativos estándares, así como las políticas, objetivos, procesos, documentos y recursos de una empresa para gestionar y asegurar la calidad de sus operaciones y del producto o servicio que ofrece.
Sin embargo, la realidad es que el 60% de las organizaciones encuestadas por la Sociedad Americana para la Calidad (ASQ), la gran mayoría de los ejecutivos afirmó no saber o no medir el impacto financiero del control de calidad, por lo que muchas veces el esfuerzo de realizar un plan de control no se aprovecha al 100%.
Es importante que este procedimiento de planificación se registre en un documento para que quede evidencia y sustento de todo el proceso que se llevó a cabo, y así eliminar subjetividades que impidan el uso de los resultados como criterios medibles y alcanzables.
Para desarrollar una estrategia para el control de calidad hay que tomar en cuenta diferentes parámetros, por lo que una herramienta de automatización de procesos es una solución óptima para integrar y ejecutar con eficiencia y agilidad estos procedimientos:
Para desarrollar, verificar y ejecutar un plan de control se deben considerar diferentes indicadores de calidad, clave para evidenciar el desarrollo y éxito del proceso, mismos que deben traducirse en resultados que evidencien:
Los pasos para llevarlo a cabo son los siguientes:
Realizar la planeación del control de calidad no es tarea simple, por lo que, integrar la asesoría de expertos en el diseño de la estrategia y la implementación de una solución para la automatización inteligente de los procesos, es la clave para ejecutarlo de forma eficaz y óptima para el negocio.
El desarrollo y adopción de un plan de control de calidad es una decisión estratégica para una organización, pues suma a la mejora de su desempeño integral y proporciona una base sólida para las iniciativas de desarrollo continuo; si esta estrategia se automatiza, los procesos serán más eficaces, precisos y confiables. Algunos de sus beneficios principales son:
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